Guión
y dirección.- Alejandro Amenábar. Año 2015.
Actores principales.- Ethan Hawke; Emma Watson y David
Thewlis.
Siete años después de su obra maestra “Los Otros”, vuelve el territorio Amenábar rodeado de su misteriosa áurea.
La colaboración
de Mediaset y Movistar +
han traído un bombardeo publicitario, creando muchas expectativas y por tanto es de obligado
cumplimiento verla y escribir sobre ella.
La
lluvia siempre presente y el ambiente gris envolviéndolo todo se convierten en
sello, imagen de la marca del director hispano-chileno.
La
película no me ha convencido del todo, esperaba más; sin embargo es
entretenida, excepto los lentos 20 primeros minutos. Película muy bien
hecha, trabajada pulcramente; con algunos fallos de ambientación, como las
fotos digitalizadas del dormitorio de la protagonista y un coche del año 2000
que aparece de lejos.
El
fondo del argumento es interesante pero se dispersa entre muchos protagonistas
que aparecen y desaparecen de escena a veces sin sentido, lo que provoca
una continua fragmentación de la película y la falta de equilibrio argumental.
La
película está basada en hechos reales: el inspector Bruce (Hawke) investiga,
con la ayuda del Dr. Reines (Thewlis) un caso de abuso a la menor Ángela,
interpretada por Emma Watson –la niña de Harry Potter- que definitivamente no
da la talla, interpretando un papel muy plano; todo ello transcurre en una ciudad de Minnesota; década de los 90. Las prácticas del Dr. -conocidas
como Regresión- en vez de ayudar a la
resolución del caso producen un efecto contrario; la investigación se enreda y
llega a convertirse en una auténtica pesadilla con multitud de implicados, sospechosos
que no llegan a ninguna parte.
Cuando
me tropecé con Amenábar en el año 2000 en Sevilla, en la Alameda de Hércules
de aquélla época, no podíamos imaginar la repercusión que
iban a tener sus películas; quince años después de aquél encuentro, sus obras
son mundialmente conocidas, y convierten una aburrida tarde Domingo del mes de
Octubre en algo bastante entretenido.